EL MILITANTE SALTA – REDACCIÓN. – Pareciera ser que en la “gestión” de la intendente de Cafayate, Rita Guevara, han comprendido mal el eslogan que dice “Cafayate, la tierra del sol y del buen vino”. O quizás sea que a causa de un consumo desmedido de “buen vino”, entendieron que debe haber más sol y le entraron a la tala indiscriminada de los árboles.

Fuentes inobjetables dentro del municipio denunciaron ante este Medio la nueva sinrazón que le ocurrió a la intendente, Guevara, que sería arrasar con cuanto ejemplar arbóreo haya, vaya uno a saber por qué o para qué. Siempre al decir de próximos a los hechos, la cuestión se explicaría en el hecho de que al no tener ninguna política pensada, todo es espasmódico; entonces hoy, quieren lavar la mala imagen inventando algo y como tampoco saben como hacerlo, terminan haciéndolo mal.

Al parecer, una mala interpretación -dicen, poniendo un manto de piedad- para no decir de una mala intención, llevaría a que las declaraciones juradas previas y necesarias para talar un árbol se firmen aduciendo algunos de los considerandos que lo permiten cuando en realidad no es así. Luego, Cafayate, cada vez tiene menos árboles.

La otra cuestión tendría que ver con la ausencia absoluta de criterio y razonabilidad de la intendente, Guevara, así como de los profesionales del área ambiental que deberían contratar a personal mínimamente especializado, o por lo menos, explicarles bien la diferencia entre tala y poda. El procedimiento que utilizan es por demás grosero y primitivo, como se puede comprobar ingresando en este enlace:

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Por último, podría señalarse que en ese municipio tampoco tienen la más mínima idea de lo que significa la comunicación política, porque como se ve, ante el modo salvaje y bruto conque tiran abajo un árbol, muy contentos filman, sobreimprimen el logotipo de la “gestión” ¡y lo viralizan! Es como si un ladrón robara y dejara un recibo.

En fin, una atrocidad más de las tantas que se están cometiendo en Cafayate desde que asumió esta “gestión” de Rita Guevara. Es de esperar que cambien pronto de rumbo o “les cambien el rumbo”, porque si esto continúa así hasta el 2027, no sea que la Serenata la celebren en “Las Ruinas de Cafayate”. –

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