El reconocido abogado constitucionalista Daniel Sabsay rechazó que la Sindicatura General de la Nación (SIGEN) audite las universidades nacionales al argumentar que que el organismo depende del Poder Ejecutivo y su intromisión en las cuentas de las altas casas de estudio “afecta su autonomía”.
Para el expresidente de la Asociación Argentina de Derecho la Auditoría General de la Nación, dependiente del Congreso, debe ser la encargada de rendir cuenta del uso de los fondos públicos.
En la misma línea, aclaró: “Se debe rendir cuenta del uso de fondos públicos pero ante el organismo adecuado”.
Ante la postura de Sabsay, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, rechazó la vulnerabilidad de la autonomía al plantear que “cuando el Estado pone los recursos, el Estado los tiene que auditar”.
“No veo una imposibilidad jurídica de que una universidad que es del Estado no pueda ser auditada por la Sindicatura General de la Nación. Está entre el capricho y la intención de ocultar los gastos”, planteó el titular de ministros al respecto, y completó: “Todos sabemos que hay gastos en la universidad que se utilizan políticamente”.