Por la cantidad de afiliados y de incumbencias laborales que reúne, UATRE, Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores, es, claramente, uno de los denominados sindicatos “gordos”. En los últimos meses ha ingresado en una profundización de su crisis que está afectando a miles de trabajadores en todos el país y a su conjunto familiar por el desmanejo en la obra social OSPRERA y por graves denuncias contra la conducción gremial a cargo de José Voytenco.
Como informó NA, el miércoles, habrá una nutrida movilización de los peones rurales en la Ciudad de Buenos Aires que pedirán la renuncia de Voytenco y de su comisión directiva ante la «crisis pública» ocasionada por la múltiples denuncias contra el secretario gremial por su «millonario patrimonio», que fue investigado por la Unidad de Información Financiera (UIF).
El “Oso” Brite utiliza su tiempo armando políticamente la rama sindical de La Libertad Avanza en apoyo del gobierno nacional de Javier Milei pero en las últimas horas se lo vio abocado a reuniones por la crisis de UATRE y “por el desamparo que están viviendo muchos trabajadores del campo argentino. Nuestra organización gremial, al tiempo que peticiona al secretario de Trabajo una respuesta rápida del gobierno nacional se ocupa por la suerte de muchos peones a los que estamos dando una mano desde nuestro sindicato», explicó Brite.
El dirigente sindical de la industria del limón, Juan Carlos «Oso» Brite, posee presencia sindical en muchas provincias del norte del país. Con una trayectoria de tres décadas en el movimiento obrero que lo llevó a acordar con dirigentes gremiales del Conurbano bonaerense como Sergio Lovero de las 62 organizaciones de La Matanza; Gerardo Casuquielo de la CGT; o Pascual Cichello de Luz y Fuerza en la CABA, milita la causa libertaria pero advierte sobre la grave crisis que están atravesando los peones rurales.
Ahora bien, la petición de la mesa sindical libertaria de “Oso” Brite podría chocar contra las gestiones realizadas por el secretario gremial, José Voytenco que habría golpeado a las puertas de Balcarce 50 para conseguir el apoyo del influyente “Lule” Menem.