Las 23 provincias y la ciudad de Buenos Aires cerraron 2024 con una merma en los ingresos provenientes de las transferencias automáticas del Estado nacional, que tuvieron una caída del 9,8% respecto de 2023 en términos reales, aunque las pérdidas no fueron iguales para todas las jurisdicciones.
La diferencia obedeció a que, si bien los recursos por coparticipación Federal cayeron de manera homogénea para todos los distritos, la provincia de Buenos Aires fue la más perjudicada en la recepción de recursos de leyes especiales y compensaciones por el consenso fiscal.
La consultora estimó que esa pérdida, a valores actualizados, fue de un total de $4,2 billones entre las 24 jurisdicciones, aunque Buenos Aires, gobernada por Axel Kicillof, fue la que concentró el grueso del ajuste, por tratarse del distrito que, por su dimensión económica y cantidad de habitantes, es el que recibe la mayor cantidad de recursos nacionales.
Esa provincia tuvo una merma de $1.056.837 millones en relación con lo que habría percibido de no haberse dado un deterioro de las transferencias ante la inflación.
A considerable distancia se ubicó el resto de los distritos, al punto que las provincias de Santa Fe y Córdoba, los más próximos en el listado, tuvieron pérdidas de $360.086 millones y $347.327 millones, respectivamente.