Pablo Grillo, el fotoperiodista que resultó gravemente herido durante la represión policial en el Congreso, mostró signos de recuperación este jueves al reconocer a su padre, Fabián Grillo, en la terapia intensiva del Hospital Ramos Mejía.
Según supo la Agencia Noticias Argentinas, el joven saludó a su padre con un «¡hola, viejo!» y le apretó la mano. «Fue fantástico», relató Fabián en diálogo con C5N. «Yo le hablaba como si fuera un nene, y me respondió. Fue un momento muy emocionante», agregó.
A pesar de la mejoría, Fabián Grillo advirtió que el estado de salud de su hijo sigue siendo delicado: «El médico me dio un baño de realidad. La situación sigue siendo grave y podría haber alguna reversión». Sin embargo, resaltó que los avances son «asombrosos» y que por ahora no necesita respirador.
En medio de la emoción por su evolución, Fabián le comentó a Pablo el impacto que tuvo su caso en la sociedad: «Le dije que armó un lío bárbaro, que todo el mundo está pendiente de él y que le mandaron saludos Mollo y León Gieco«. Según su padre, cuando el joven se entere de todo el apoyo que recibió, «seguro se va a reír».